lunes, 28 de octubre de 2013

Mnemósine y las musas


Mnemósine, en la mitología griega, fue la diosa de la memoria. Una Titánide nacida de Gea y Urano, se emparejó con Zeus y dio la vida a las nueve musas, las diosas inspiradoras de las artes y las ciencias.

De la palabra musa han derivado otras palabras como museo (lugar de culto a las musas) o música (el arte de las musas).

Las nueve Musas son:

Calíope (Καλλιόπη, ‘la de la bella voz”): musa de la poesía épica
Clío (Κλειώ, ‘la que celebra’): musa de la historia
Erato (Ἐρατώ, ‘amorosa’): musa de la poesía lírica
Euterpe (Ευτέρπη, ‘deleite’): musa de la musica, especialmente la de la flauta
Melpómene (Μελπομένη, ‘cantar’): musa de la tragedia
Polimnia (Πολυμνία, ‘muchos himnos’): musa de la danza o la geometría
Talía (θάλλεω, ‘florecer’): musa de la comedia
Terpsícore (Τερψιχόρη, ‘deleite de la danza’): musa de la danza
Urania (Ουρανία, ‘celestial’): musa de la astronomía

miércoles, 23 de octubre de 2013

No dudaría (página 33)

Si pudiera olvidar
Todo aquello que fui
Si pudiera borrar
Todo lo que yo vi
No dudaría
No dudaría en volver a reír

Si pudiera explicar
Las vidas que quite
Si pudiera quemar
Las armas que use
No dudaría
No dudaría en volver a reír

Prometo ver la alegría
Escarmentar de la experiencia
Pero nunca, nunca mas
Usar la violencia

Si pudiera sembrar
Los campos que arrasé
Si pudiera devolver
La paz que quité
No dudaría
No dudaría en volver a reír

Si pudiera olvidar
Aquel llanto que oí
Si pudiera lograr
Apartarlo de mí
No dudaría
No dudaría en volver a reír

Prometo ver la alegría
Escarmentar de la experiencia
Pero nunca, nunca mas
Usar la violencia



domingo, 20 de octubre de 2013

Acentúa correctamente

La sílaba tónica [comienza]
Palabras con acentos [comineza]
Coloca las palabras en agudas, llanas yesdrújulas [comienza]
Coloca las palabras en agudas, llanas y esdrújulas [comienza] 
Coloca las palabras en agudas llanas y esdrújulas [comienza]
Coloca las palabras en agudas llanas y esdrújulas [comienza]

Test sobre las reglas de acentuación [comienza]

viernes, 11 de octubre de 2013

La importacia de la tilde

Las reglas ortográficas tienen una razón de ser. Aunque a veces no nos fijemos en una tilde o en una coma, no es lo mismo que te digan "come cerdo" o que te digan "come, cerdo". Tampoco es lo mismo decir que alguien presidió o que alguien esté en el presidio.

Para revisar las reglas de acentuación, primero debemos tener en cuenta que cualquier palabra (no cuentan las monosílabas) tienen una sílaba tónica y una o más átonas (las que no son tónicas)

- Si la sílaba tónica es la última, estamos ante una palabra aguda (Cordel, camión)
- Si la sílaba tónica es la penúltima, estamos ante una palabra llana (piz, cuadrado)
- Si la sílaba tónica es la antepenúltima, estamos ante una palabra esdrújula (pimide)
- Si la sílaba tónica está más allá de la antepenúltima, estamos ante una palabra sobresdrújula (dijamelo, tranquilamente)

Ahora que sabemos qué es la sílaba tónica, podremos  aplicar las reglas de acentuación.

AGUDAS:
Se acentúan si terminan en -N, -S o vocal: camión, caerás, veré.
No se acentúan si no cumplen estas condiciones: cartel, castor.

LLANAS: 
Justo al revés que las agudas. Se acentúan si terminan en consonante distinta de  -N, -S: lápiz, árbol, azúcar.
No se acentúan si no cumple estas condiciones: importante, archivos, aperitivo.

ESDRÚJULAS:
Se acentúan siempre: pirámide, agrícola, América.

SOBRESDRÚJULAS:
Hay dos maneras de formar estas palabras.
- Imperativo verbal con un pronómbre: dímelo, endósaselo, dibújamelo. En este caso se acentúan siempre.
- Adverbios terminados en -mente.
Se acentuarán si el adjetivo del que procede llevaba tilde: rápida => rápidamente.
No se acentuarán si el adjetivo del que procede no llevaba tilde: traquila => tranquilamente.


lunes, 7 de octubre de 2013

Lecturas 1º

Lecturas 1º ESO
Obligatoria:
Manolito Gafotas (de Elvira Lindo)
1º C leerá este libro en el primer trimestre

Opcionales:
El invento del siglo
Capitán Nadie




"Me llamo Manolito García Moreno, pero si tú entras a mi barrio y le preguntas al primer tío que pase:
- Oiga, por favor, ¿Manolito García Moreno?
El tío, una de dos, o se encoge de hombros o te suelta:
- Oiga, y a mí qué me cuenta.
Porque por Manolito García Moreno no me conoce ni el Orejones López, que es mi mejor amigo, aunque algunas veces sea un cochino y un traidor y otras, un cochino traidor, así, todo junto y con todas sus letras, pero es mi mejor amigo y mola un pegote.
En Carabanchel, que es mi barrio, por si no te lo había dicho, todo el mundo me conoce por Manolito Gafotas. Todo el mundo que me conoce, claro. Los que no me conocen no saben ni que llevo gafas desde que tenía cinco años. Ahora, que ellos se lo pierden.
Me pusieron Manolito por el camión de mi padre, y al camión le pusieron Manolito por mi padre, que se llama Manolo. A mi padre le pusieron Manolo por su padre, y así hasta el principio de los tiempos. O sea, que por si no lo sabe Steven Spielberg, el primer dinosaurio velocirraptor se llamaba Manolo, y así hasta nuestros días. Hasta el último Manolito García, que soy yo, el último mono. Así es como me llama mi madre en algunos momentos cruciales, y no me llama así porque sea una investigadora de los orígenes de la humanidad. Me llama así cuando está a punto de soltarme alguna galleta o colleja. A mí me fastidia que me llame el último mono, y a ella le fastidia que en el barrio me llamen el Gafotas. Está visto que nos fastidian cosas distintas, aunque seamos de la misma familia.
El Imbécil es mi hermanito pequeño, el único que tengo. A mi madre no le gusta que le llame el Imbécil; no hay ningún mote que a ella le haga gracia. Me salio el primer día que nació. Me llevó mi abuelo al hospital, yo tenía cinco años; me acuerdo porque acababa de estrenar mis primeras gafas y mi vecina Luisa siempre me decía: "Pobrecillo, con cinco años".